1. ¿Quién es el Beato Luis Monza?
Luis Monza nació en Cislago (Varese) el 22 de año junio de 1898, de una familia campesina. Sus únicas riquezas eran el trabajo, el valor y la fe.
Entró en el seminario a los 18 años, después de haber conocido la fatiga del trabajo en los campos, las vigilias nocturnas para proseguir los estudios y la lucha por la sobrevivencia diaria de la pobre gente.
Fue ordenado sacerdote el 19 de septiembre de 1925.
Su primer encargo Pastoral lo desempeño con los jóvenes de la Parroquia de Vedano Olona (Varese).
El inicio de su vida sacerdotal estuvo marcado por pruebas de todo género hasta llegar a la injusticia de la cárcel durante el régimen fascista.
En año 1929 fue destinado al Santuario de Saronno, donde fue promotor de numerosas iniciativas juveniles.
Aquí, su mirada afinada por la prueba y alcanzada por la mirada de Dios, había aprendido a mirar lejos, al mundo entero, un mundo marcado por la soledad, la tristeza y el egoísmo que “urgía llevarlo de nuevo al amor de Dios”. La intuición era grandiosa, pero era necesario esperar que el Señor indicara el camino a seguir. De modo especial, frente al mundo “que se había vuelto pagano” –como solía decir él –tuvo la intuición de ver en la comunidad de los primeros cristianos la forma más apta para estar cerca del hombre contemporáneo y para anunciar el Evangelio.
En el año 1936 fue nombrado párroco de San Giovanni di Lecco, donde ejerció su sacerdocio “según el corazón de Dios”. En el año 1937 encontró el camino que el Señor le indicaba.
De su corazón de padre nació el Instituto Secular de las Pequeñas Apóstoles de la Caridad, llamadas, por don del Espíritu Santo, a llevar al mundo la plenitud de la vida, consagrada al amor total de Cristo, “con el fervor apostólico de la primera comunidad cristiana”.
El 29 de septiembre del año 1954, padre Luis se retiró y silenciosamente desapareció, como el grano de trigo que muere para dar vida a la espiga, consciente de que había cumplido su misión y que había dado a la comunidad los elementos de salida y de llegada: una línea ascendiente hacia Dios. Lo demás vino por añadidura.
El 30 de Abril 2006, en Milano, Padre Luis Monza fue proclamado Beato.
2. ¿Cuál es su mensaje?
Padre Luis veía a los cristianos de la sociedad como presencias vivas y testigos de amor en la vida de cada día. Esta profunda intuición nació al ver el proceso de secularización de su tiempo en el que a una sociedad basada en valores se había sobrepuesto una sociedad competidora que no tenía respecto de la persona para lo que era sino para lo que podía conseguir y ganar.
Hoy su mensaje es muy actual e invita al cristiano a no sentirse a salvo del “nuevo paganismo” sino a compartir, en nombre de la caridad, la vida de los hombres y de las mujeres penetrando la sociedad moderna “con el espíritu de los Apóstoles para hacer saborear la espiritualidad del Evangelio y hacer gustar la alegría de vivir como hermanos en Cristo”.
El mensaje de padre Luis es para todos, hombre y mujeres, llamados a vivir su propia existencia en lo cotidiano, en la familia o en la vida de consagración, en su propia profesión o en el tiempo libre… son palabras que acompañan en la cotidianidad.
Eje de su enseñanza es la caridad que mueve la persona a hacerse cargo del hermano y de la comunidad, y que se expresa en las relaciones interpersonales y se refleja en la acción misionera y evangelizadora.
El ideal es la comunidad de los primeros cristianos que vivía “un solo corazón y una sola alma” poniendo la caridad como primera e irrenunciable regla de convivencia humana y como el medio más idóneo para estar cerca de los hombres y las mujeres de hoy y para anunciar el Evangelio de Cristo. En la profunda relación personal con el Señor y en el abandono confiado en la oración el cristiano encuentra el sentido de sus días para una vida animada por la esperanza.
Padre Luis invita a todos, hoy como en su tiempo: “Al mundo moderno moralmente turbado debemos poder decir con nuestra vida: mirad como es estupendo vivir en el amor”
3. ¿A quién se dirige el Beato Luis Monza?
Su mensaje fascinó y sigue fascinando hoy todavía. Al carisma de padre Luis Monza se inspiran varios grupos y experiencias que forman, cada una con su característica y peculiaridad, una expresión de la misma espiritualidad.
Son como los granos de una espiga nacida de la semilla evangélica que la misma vida de padre Luis ha representado, es decir una vida consumida en la caridad: Pequeñas Apóstoles de la Caridad, Pequeños Apóstoles de la Caridad, sacerdotes, niños, jóvenes, parejas, familias enteras, operadores de “La Nostra Famiglia”, viudas, amigos, voluntarios… todas personas que escogen acercarse más a la espiritualidad de padre Luis para traducirla en uno estilo de vida cotidiana.
4. ¿Qué fundó el Beato Luis Monza?
Padre Luis pensó en algunas personas consagradas que, viviendo en el mundo, supieran testimoniar la caridad y la “Alegría de vivir como hermanos en Cristo” viviendo en el mundo, con los hombres y mujeres de su tiempo: así nació el Instituto Secular de las Pequeñas Apóstoles de la Caridad, con esta especifica forma de vivir la consagración, a pesar de que aún no había sido reconocida por la Iglesia y que solo en el año 1947 será oficializada. Padre Luis, junto a otros, fue un precursor.
Padre Luis fundó “La Nostra Famiglia” que quiere indicar un espíritu, un ideal, un estilo de vida que es lo de hacer del mundo una grande “familia” unida por enlaces de solidaridad y hermandad.
Todos pueden ser parte de esta “familia” a condición que fomenten con el testimonio de vida el fuego de la caridad de los primeros cristianos; el mismo fuego que da calor a la historia de todos los tiempos.
La caridad hacia los más pobres ha asumido una clara identidad en los servicios que brinda la Asociación “La Nostra Famiglia” a favor de las personas con discapacidad.
Era el 28 de mayo del año 1946 cuando los primeros dos niños ingresaron en la casa de Vedano Olona, cuando padre Luis aún vivía.
En el año 1954 el Ministerio de Salud hizo un reconocimiento público jurídico al primer Centro de rehabilitación en Italia: eso ha sido el Centro de “La Nostra Famiglia”.
Desde entonces “La Nostra Famiglia” no dejó de crecer. Hoy en día la Asociación está presente en 8 regiones italianas y en 4 Países en el mundo.
Es preciso recordar que para padre Luis los pobres eran aquellos que vivían cualquiera necesidad y que solicitaban abiertamente o indirectamente una ayuda de carácter espiritual y/o material. De manera particular él se refería a algunas categorías de personas que son las mismas que nos indica el Evangelio: enfermos, niños con discapacidad, personas de bajos recursos económicos, personas con diferentes dificultades.
La pobreza no es una condición estática sino dinámica y varía de acuerdo a los contextos históricos y socios culturales. Padre Luis, a lo largo de su existencia demostró cuanto sea necesario poner atención al contexto actual para poder identificar las personas que más necesitan de acuerdo al criterio de la caridad. Al presentarse una necesidad nunca juzgaba y tampoco hacía diferencias: en este mismo instante alguien necesitaba de su ayuda y era necesario actuar.
La “MISIÓN” de “La Nostra Famiglia” es la expresión concreta y actual de lo que padre Luis quiso enseñar: “Tutelar la dignidad y mejorar la calidad de vida de las personas con discapacidad, particularmente en edad evolutiva – a través específicos programas rehabilitativos.”
“La Nostra Famiglia” quiere asumir no solo el problema de la discapacidad, sino también de las dificultades y sufrimientos personales y familiares que conlleva.
La Asociación se propone dar su propia contribución para el desarrollo de la investigación y de los estudios científicos en el área de la patología del desarrollo y de ofrecer itinerarios formativos para jóvenes y operadores que ya trabajan en el sector socio-sanitario.
“La Nostra Famiglia” continua a difundirse y a vivir la profecía de su Fundador que, cuando todavía la Obra no era que una pequeña realidad, dijo: “… y la Obra se extenderá hasta los últimos confines de la tierra”.
5. ¿Cómo puedo orar al Beato Luis Monza?
Para eso han sido preparados algunos subsidios para la oración.
6. ¿Dónde está sepultado padre Luis Monza?
El Beato Luis Monza está sepultado en la Capilla de “La Nostra Famiglia” en Ponte Lambro (Como) – Italia